domingo, 28 de octubre de 2007

La salud de los enfermos

En el cuento de Cortazar la historia gira entorno a la estabilidad emocional de una madre, que deben lograr los integrantes de su familia, para no complicar su frágil estado de salud. Sus familiares se ocupan de ocultar la muerte de uno de sus hijos en Uruguay, haciéndole creer que viajo a Brasil para realizar un trabajo para una empresa importante y de esquivar, mediante cartas, la posibilidad de una visita de su hijo. A lo largo del cuento la mentira crece cada vez más, llegando al punto de ser irreversible. Al final, que es el de su muerte, ella termina admitiendo haber aceptado ser engañada y su familia creyendo en su gran mentira.

Con el pueblo argentino sucede algo similar; luego de un periodo muy difícil de crisis, de hambre, de desempleo, de caos y de luchas internas, no se le puede dar malas noticias, hay que intentar de cualquier forma posible mantener su estabilidad emocional, para evitar recaídas en su frágil estado de ánimo. Y si darle solo buenas noticias implica la utilización de la mentira, (esconderle los diarios a mamá e inventarle cartas de Alejandro desde Brasil) bienvenido sea, ya que eso parece no ser importante.

Pero cuando estando al tanto de la mentira, acepte ser engañado y por tanto, acepte esa irrealidad, que le quieren presentar, es mucho más grave.
El pacto de mentira puede ser ventajoso en el corto plazo, para quien miente, pero es dañino en el largo plazo, ya que a medida que la mentira avanza es cada vez más difícil volver hacia atrás; la tarea de recuperar la credibilidad se hace imposible y no hay oportunidad de mantener una comunicación sincera., imprescindible en una relación entre representantes y representados.

Elegir seguir siendo mentido, es tomar la mentira de otros para mentirse a uno mismo. Y tal es el camino que parece hemos elegido.

viernes, 26 de octubre de 2007

Viaje al interior

La historia sobre ese viaje no tenía muchos justificativos, sólo el recuerdo. Cuando llegó al pueblo donde tantos años había vivido de chico, no lo reconoció, habían pasado cincuenta años.
Las casas ya no presentaban frentes amplios y altos, no había zaguanes donde los jóvenes podrían sentarse, todo se veía muy moderno. Le parecía muy raro no ver gente, la ciudad había aumentado al triple y sin embargo no se notaba en las calles.
Siguió recorriendo hasta que frenó en frente a una casa. Techo de chapa, galería extensa y silueta alargada le parecían familiares. Pudo apreciar un árbol dentro del terreno de esa casa. Trepó a el y empezó a recordar su infancia al mirar a su alrededor. Ya no era un barrio de coloridas chacras, sino que era parte de la ciudad. Apenas daba respiro el patio de cada casa donde, por cierto, tampoco se veía gente.
Miró la hora, el tiempo se había acabado, tenía que volver. Se detuvo unos segundo para pensar y observó nuevamente su reloj, eran las 3 de la tarde.
Volvió, se levantó de su cama, fue hasta la cocina, se asomo por el ventanal que en ella hay y pudo apreciar al Sol, tan resplandeciente sobre aquellos bellos árboles que se encuentran al Este de la chacra.
Árboles donde tanto tiempo invierten los chicos entre sus ramas.

viernes, 19 de octubre de 2007

Mi verdad

Sin tiernas palabras escupo sin decoro la verdad de mi corazón, rasgando mis ojos nublados por las lágrimas injustas, la careta que use de velo hecho e andas hace un tiempo; mientras el joven acordeonista acababa de tocar para la dulce pareja el son del 2x4.
Ya con el rostro descubierto y lloroso, sin resguardo de esos ojos pardos deseosos de ese amor que nunca de mi lograra sonsacar, vomito con dolor esta verdad: el vampiro de la noche ha regresado en andas a mis recuerdos acompañado por su enemigo de las cartas de fuego, trayendo ambos una vez mas a mi ese sabor amargo, ese gusto a sal de lagrima ya gastada.
Recuerdos que no tiene sentido en este hoy pero que logran ennegrecer nuestro presente, por que, como puedo quererte si ante ti ellos se interponen, sin siquiera saberlo.
Hoy injusta la ruleta; y ese maldito numero que mantiene la cuanta pendiente, el azar no existe si todo se remonta a esa cifra…
¿Es que todo, es solo un juego? ¿Cómo mi mente joven puede descifrar esta cifra? No voy a lastimarte te lo aseguro, aunque lo que queda de mi muera por ello.
5/07/07

martes, 16 de octubre de 2007

Plaza

Recuerdo la plaza de hace unos años, con piedritas en los senderos, con los bancos blancos arreglados, con los canteros con flores y pasto, con los monumentos limpios.


Ahora me veo doblando con el freno apretado sobre las piedras, limpiando parte del sendero. Agarrando un grafitti, tal como me enseño guillermo, y escribiendo mi nombre, que por ese entonces no había tomado ninguna forma rara a fuerza de los desvios de mis otros nombres en el msn. Daba algunas vueltas a la columna (para mi siempre fue la estatua de la libertad, y no de la constitución nacional) y encaraba en alguno de sus 8 sentidos, como arriba de una mesa, como en una calle ancha, más alta, esquivando a los placeros, que con toda la razón de la norma nos querían sacar, privandonos de un placer enorme.

lunes, 15 de octubre de 2007

DESPUES DE LA LOCURA

El camino hacia ti me llevo a ningún lugar y la estrella que nos observaba en nuestros veranos de puertas se perdió en la desolación del rencor sin comprender a quien mas te necesitaba.
El abrazo se despidió en un sueño initerminable de adioses en el pasado cercano del ayer…
El desierto de dolor que nos separa arde en las sombras y hiela en el día por ese desprecio por no poder comprender nuestro destino enhebrado en hilos de ilusión fantasmal.
Manos que saludan a tu sombra distante, miradas que penetran en el charco del fin inaceptable.
Capaz que la luna nos acune en las noches de río y alcohol desesperado por la melancolía que nos abraza, haciendo que “Nostalgia del amor y la locura” sea solo un recuerdo del paso de tu ser tan lejano en este hoy que me persigue para que no olvide lo que es tener a tu alma partida en dos y alejadas una de la otra, por ser unos pequeños ignorantes del amor real, entre corazones destruidos por la necesidad de ser amados y hasta ese momento no correspondidos.
Asustados como cachorros, el miedo nos gano de mano dejando a la razón de ser tan impenetrable como tu mente.
Torbellinos revuelven mis pensamientos, las llamas del fénix comienzan a apagarse gracias a los vientos de ilusión que me creas solo al soñar con vos y creer que tal vez ese sueño se convierta en realidad.
Los segundos siguientes al despertar son como una daga que se hunde cada vez más con cada suspiro que exhalo al pensar en vos.
Descubro que la ilusión no es mi camino porque soñando que estas aquí conmigo sentados en puertas de verano contemplando las estrellas que alguna vez fueron espectadoras de nuestras charlas.
Adiós, hasta que me perdones por llegar tarde a tu corazón…

miércoles, 10 de octubre de 2007

Decadencia

En ese entonces no contaba con la madurez necesaria para hacer un análisis crítico y me sometí, como se someten tantos ante la experiencia de aquel soberbio que se atreve a hacerse notar. Me convertí en uno de sus siervos, una esclava del sistema de mentiras engendrado por esos miles poderosos que se alzan ante las multitudes, diciéndose defender y respetar nuestros derechos, que terminan solo siendo los suyos, los de ese grupo.
Años después comprendí el significado de la palabra oligarquía. Antes me costaba tanto diferenciar la palabra democracia de la palabra demagogia, pero ahora sé que la demagogia es, como él, quien logró imponerse ante alguien débil.
La dictadura era solo una palabra atroz para mis oídos, no un hecho, no una posibilidad. Era solo algo lejano que ocurrió en repetidas ocasiones, pero no, ahora no. Cómo podría ocurrir ahora, si somos un pueblo avanzado incapaz de caer en sus garras primitivas. Sin embargo, un haz de luz revelador lentamente fue preemitiéndonos ver claramente todas sus características reflejadas en este régimen al cual nos sometimos con una sonrisa en el rostro, delegando nuestras vidas a los depredadores del sistema.
Años han pasado desde que miles de manos inocentes tomaron una decisión que nos representa hasta hoy. La fuerte mayoría se impuso, pero, ¿contaba con la razón?. La minoría ahora reclama y quiere hacerse escuchar, y a esa minoría se suman también algunos de esos fuertes que hicieron valer su opinión en el momento preciso, y ahora se arrepienten.
Poco falta para remediar nuestro error. A 18 días de las elecciones nacionales muchos responden que todavía no saben a quien votar. Es difícil elegir entre los mismos rostros de siempre, esos que ya hemos comprobado que no son caras, sino crueles caretas con una sonrisa dibujada y que cuentan con las palabras precisas para hacernos caer, aunque dichas palabras no sean más que filosofía barata, falta de verdades.
Más que un consejo, sería una súplica, un llamado a la solidaridad, a la memoria. Este gobierno no es más que una obra de arte que nos quieren pintar para sofocar la realidad. Para opacar los desaparecidos, la inflación, el robo, y miles de carencias y atentados al pueblo.
Confío en la sabiduría de cada uno para tomar las decisiones correctas, y para darse cuenta quienes velan por el bienestar y la seguridad del pueblo, y quienes velan por su propio bienestar y seguridad.
El objetivo primordial hoy en día es instruir a la sociedad. Construir un país de gente pensante, capaz de hacer valer sus derechos por si mismos, que no pueda ser llevada por encima por algún que otro corrupto que intente aprovecharse de las desventajas de su propio pueblo.
No queremos más deKadencia.

miércoles, 3 de octubre de 2007

Alma grande

Cuando transito las calles de hormigón, de estrechas veredas y de casas con frentes amplios, siento lo mismo que otras ciudades de las provincias de antiguedad símilar. La fisonomía de calles rectas y cuadras perfectamente simétricas; y el paisaje descripto, confunde trasladandonos inconcientemente de una esquina de Gualeguay, a una de Concepción, Concordía o Paraná. Uno avanza por la estrechez a los lados, encausado por los frentes, a un horizonte gris, surtido de colores por la variedad de casas modernas y árboles, que de tanto en tanto, o consecutivamente (como en un tunel urbano), aparecen en nuetro camino.

Pero si hay algo que distingue a Gualeguay del paisaje de las otras ciudades, es su plaza. Al llegar a ella, la amplitud, el cielo, la diversidad de verdes y de monumentos como de árboles y paseos rompen con nuestra impresión de monotonía de las calles.

Cuando camino por la plaza constitución tengo la impresión de caminar por la plaza de una ciudad grande.

Tal será el legado de nuestro pasado, de un momento en particular de nuestra historia o la sumatoria de nuestros presentes. Nuestra plaza es grande más allá de su tamaño; crecío grande esperando que sus calles, y sus habitantes de la acompañen.

Y si como dicen, la plaza es "el alma del pueblo"... la plaza es un misterio inquietante.